Hola , espero que festejéis este día obsequiando algún libro, y si es con rosas mejor que mejor., yo os obsequio mi “granito de arena” con esta magníficas poesías que solo los “grandes” podrían escribir.
Jesús Pascual, comienza una bella poesía con palabras, que a todos los lectores nos suenan. “A ti, hermoso libro… de mis noches compañero…
A ti, hermoso libro
de mis noches compañero,
y de muchos un amigo,
a tí, que abres deseos
para un mundo escondido
que entre tus páginas, como un sueño,
nace con el ritmo
de quien nuevos senderos
abre con su ilusión y cariño.
A tí, que siembras en los niños
semillas de esperanza
para abrir nuevos caminos
que todas las fronteras traspasan
y llevan a buen destino
todo lo que tus páginas cantan.
A ti, libro sencillo
que abres tu ventana
a los ojos de quien siente muy vivo
todo lo que tus hojas plasman:
tesoros escondidos,
amores y desamores eternos,
estrellasy planetas perdidos,
personajes y sueños
que nos tienen en vilo.
No lo dudes, hazte compañero
de tu amigo el libro.
El gran escritor Miguel de Unamuno, nos trasmite algunas preguntas, que nos hacemos los lectores… “Leer, leer, leer, vivir la vida que otros soñaron…
Leer, leer, leer, vivir la vida
que otros soñaron.
Leer, leer, el alma olvidada
las cosas que pasaron.
Leer, leer, leer, ¿seré lectura
mañana también yo?
¿Seré mi creador, mi criatura,
seré lo que pasó?
Maritza Valle Tejeda, nos habla de ese amigo fiel que siempre está junto a nosotros. “Amigo fiel que me acompañas cuando hay frío o calor…
Amigo fiel que me acompañas
cuando hay frio o calor,
amigo sabio que me enseñas
de la vida lo mejor.
Contigo descubro el mundo
entre paginas de amor,
de lo simple a lo profundo
de la alegría al dolor.
Amar a mi patria me enseñas,
también como hacer un avión,
me cuentas historias pequeñas
¡Es tuyo mi corazón!
Tu eres libro mi amigo
y yo de ti disfrutare,
quédate siempre conmigo
que yo también te amare
Jorge Luís Borges, con “poemas de los dones”
Nadie rebaje a lágrima o reproche
esta declaración de la maestría
De Dios, que con magnífica ironía
Me dio a la vez los libros y la noche.
esta declaración de la maestría
De Dios, que con magnífica ironía
Me dio a la vez los libros y la noche.
Rubén Darío con “Libro extraño”.
Libros extraños que halagáis a la mente
en un lenguaje inaudito y tan raro,
y de que lo más puro y lo más caro
hacéis brotar la misteriosa fuente.
en un lenguaje inaudito y tan raro,
y de que lo más puro y lo más caro
hacéis brotar la misteriosa fuente.
Juan ramón Jiménez, pide un deseo, en “Quisiera que mi libro”
Quisiera que mi libro
fuese, como es el cielo por la noche,
todo verdad presente, sin historia.
Que, como él, se diera en cada instante,
todo, con todas sus estrellas; sin
que, niñez, juventud, vejez, quitaran
ni pusieran encanto a su hermosura inmensa.
¡Temblor, relumbre, música
presentes y totales!
¡Temblor, relumbre, música en la frente
-cielo del corazón- del libro puro!
fuese, como es el cielo por la noche,
todo verdad presente, sin historia.
Que, como él, se diera en cada instante,
todo, con todas sus estrellas; sin
que, niñez, juventud, vejez, quitaran
ni pusieran encanto a su hermosura inmensa.
¡Temblor, relumbre, música
presentes y totales!
¡Temblor, relumbre, música en la frente
-cielo del corazón- del libro puro!
Las Comedias', de Calderón de la Barca.
Discreto amigo es un libro:
¡qué a propósito habla
siempre en lo que quiero yo,
siempre en lo que yo no quiero…!
¡qué a propósito habla
siempre en lo que quiero yo,
siempre en lo que yo no quiero…!
Jardín de invierno', de Pablo Neruda.
Llega el invierno. Espléndido dictado
me dan las lentas hojas
vestidas de silencio y amarillo.
me dan las lentas hojas
vestidas de silencio y amarillo.
Soy un libro de nieve,
una espaciosa mano, una pradera,
un círculo que espera,
pertenezco a la tierra y a su invierno.
una espaciosa mano, una pradera,
un círculo que espera,
pertenezco a la tierra y a su invierno.
Creció el rumor del mundo en el follaje,
ardió después el trigo constelado
por flores rojas como quemaduras,
luego llegó el otoño a establecer
la escritura del vino:
todo pasó, fue cielo pasajero
la copa del estío,
y se apagó la nube navegante.
ardió después el trigo constelado
por flores rojas como quemaduras,
luego llegó el otoño a establecer
la escritura del vino:
todo pasó, fue cielo pasajero
la copa del estío,
y se apagó la nube navegante.
Yo esperé en el balcón tan enlutado,
como ayer con las yedras de mi infancia,
que la tierra extendiera
sus alas en mi amor deshabitado.
Yo supe que la rosa caería
y el hueso del durazno transitorio
volvería a dormir y a germinar:
y me embriagué con la copa del aire
hasta que todo el mar se hizo nocturno
y el arrebol se convirtió en ceniza.
como ayer con las yedras de mi infancia,
que la tierra extendiera
sus alas en mi amor deshabitado.
Yo supe que la rosa caería
y el hueso del durazno transitorio
volvería a dormir y a germinar:
y me embriagué con la copa del aire
hasta que todo el mar se hizo nocturno
y el arrebol se convirtió en ceniza.
La tierra vive ahora
tranquilizando su interrogatorio,
extendida la piel de su silencio.
tranquilizando su interrogatorio,
extendida la piel de su silencio.
Yo vuelvo a ser ahora
el taciturno que llegó de lejos
envuelto en lluvia fría y en campanas:
debo a la muerte pura de la tierra
la voluntad de mis gerruinaciones.
el taciturno que llegó de lejos
envuelto en lluvia fría y en campanas:
debo a la muerte pura de la tierra
la voluntad de mis gerruinaciones.
Una de mis escritoras españolas favoritas, Gloria Fuertes, con algo de humor anima a pequeños lectores…” Don libro está helado”
Estaba el señor don Libro
Sentadito en su sillón,
con un ojo pasaba la hoja
con el otro ve televisión.
Sentadito en su sillón,
con un ojo pasaba la hoja
con el otro ve televisión.
Estaba el señor don Libro
Aburrido en su sillón,
Esperando a que viniera... (a leerle)
Algún pequeño lector.
Aburrido en su sillón,
Esperando a que viniera... (a leerle)
Algún pequeño lector.
Don Libro era un tío sabio,
que sabía de luna y de sol,
que sabía de tierras y mares,
de historias y aves,
de peces de todo color.
que sabía de luna y de sol,
que sabía de tierras y mares,
de historias y aves,
de peces de todo color.
Estaba el señor don Libro,
tiritando de frío en su sillón,
vino un niño, lo cogió en sus manos
y el libro entró en calor.
tiritando de frío en su sillón,
vino un niño, lo cogió en sus manos
y el libro entró en calor.
Por fuertes y fronteras', de Luis Alberto de Cuenca.
Qué sería de mí sin vosotros,
tiranos y, a la vez, embajadores,
de la imaginación,
verdugos del deseo
y, al mismo tiempo, mensajeros suyos,
libros llenos de cosas deplorables
y de cosas sublimes,
a los que odiar
o por los que morir.
tiranos y, a la vez, embajadores,
de la imaginación,
verdugos del deseo
y, al mismo tiempo, mensajeros suyos,
libros llenos de cosas deplorables
y de cosas sublimes,
a los que odiar
o por los que morir.
Herman Hesse, nos recuerda la filosofía de la vida con los libros…
Todos los libros del mundo
no te dan felicidad
pero te conducen en secreto
hacia ti mismo.
Allí encuentras todo lo que necesitas,
el sol, las estrellas y la luna
pues la luz que tú buscas
habita en ti mismo.
La sabiduría que buscaste
en las librerías
reluce en cada página…
Y ahora es tuya.
Y por último, Gabriela Mistral y su poema del libro enamorado…
He aquí niña mía,
Que me han hecho tu amigo,
He aquí que cada día
Conversaras conmigo.
Ponme una ropa oscura,
La ropa de labor;
Trátame con dulzura,
Cual si fuese una flor.
No me eches manchas
Sobre la nieve del semblante;
No pienses que recobre
Su lámina brillante.
Gozarás cuando veas
Que hermoso me conservo,
Sufrirás, si me afeas,
Del daño de tu siervo.
Verás, cuando oigas
Locas historias infantiles,
Que charladoras bocas
Son mis hojas útiles.
Mi saber es liviano,
Mi saber no es profundo,
Niña, me das la mano
Y yo te muestro el mundo.
Yo te presento un hada
Yo te Charlo del Sol;
De la rosa encantada,
Prima del arrebol.
Mis hojitas nevadas
Piden solo un favor:
De tus manos rosadas;
Un poquito de amor.
Feliz lectura…
Una entrada sencillamente hermosa, imposible no conmoverse, todos los amantes de los libros sabemos lo que significa un amigo tan fiel.
ResponderEliminarMuy feliz día del libro.
Besos.
Grandísima entrada!!! Gracias por reunir tan maravillosos poemas. Espero que hayas pasado un feliz día!
ResponderEliminarBesotes!!!
Maravillosa, grandísima y completa esta entrada,algunos de los poemas no los conocía, así que con tu permiso me los llevo.Ya ha pasado el "reconocido" día del libro, aunque como nosotros, los amantes de la lectura lo celebramos los días del año,te deseo un feliz día. Besos.
ResponderEliminarExcelente homenaje!
ResponderEliminarBesos